Errores comunicacionales en las autoridades de gobierno habrían sido la causa de la «indignación social» por intoxicados en Quintero y Puchuncaví, según lo determinó un estudio realizado por las organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud (OPS y OMS).
El informe -realizado tras un trabajo en terreno entre el 06 y 14 de septiembre- acusa que los errores de la estrategia comunicacional desplegada por el gobierno contribuyeron a que la situación «escalara a un entorno social de indignación alto». El informe además hizo recomendaciones en materia de servicios de salud, epidemiología, salud mental, ambiente y comunicación de riesgo.
Los expertos internacionales son consultores en emergencia y comunicaciones y especialistas en comunicación de riesgo, epidemiología de campo y en servicios de Salud de Chile, Perú, Costa Rica y Cuba y no detectaron mayores problemas en la red de servicios para atender la emergencia, y solo sugirieron fortalecer la atención primaria y su coordinación con niveles más complejos. Además, sugieren que sería necesario construir en la zona el nuevo hospital anunciado por el gobierno.
En el detalle del cuestionamiento el informe hace referencia al mensaje de un Seremi mientras explicaba el daño a la salud, cuando afirmó «lo que se pone en juego acá es la vida de las personas». Según el documento, ello elevó el riesgo técnico de peligro que representaban las emanaciones, lo que aumentó la
incertidumbre entre los afectados, pues «la gente se mueve más por la emoción que por la razón».