Se estima que en Chile mueren a diario dos mujeres por cáncer cervicouterino, enfermedad que se puede prevenir prácticamente en su totalidad si se detecta a tiempo la presencia del Virus del Papiloma Humano (VPH), el cual se trasmite por contacto sexual.
Según las recomendaciones médicas, realizarse chequeos periódicos y tener los exámenes de rutina al día es fundamental para evitar que se llegue a desarrollar un cáncer. Por eso, la incorporación de nuevas pruebas diagnósticas de detección del virus es de vital importancia para detener los fallecimientos por esta causa.
En ese sentido, hace un tiempo está disponible en la V Región un moderno examen que permite a los especialistas identificar si una mujer es portadora del virus y conocer con precisión el riesgo de que una infección se convierta en cáncer, para así poder tomar decisiones sobre su tratamiento de manera oportuna.
Se trata el Test de VPH, el que según el Dr. Christian Frank de director del Centro Gineco Obstétrico, CEGIN, “tiene una excelente sensibilidad, superior al Papanicolaou (Pap) e incluso permite diagnosticar lesiones cervicales en aquellas mujeres en el que el Pap ha sido informado normal”, por lo que agrega que es un “excelente medio de prevención del cáncer”.
El cáncer cervicouterino se ha transformado en la segunda causa de muerte femenina en mujeres de entre 20 y 44 años, por lo que el especialista además recomienda este test a “mujeres sobre 30 años, especialmente a aquellas de mayor riesgo de contraer el VPH y también a aquellas en que el Pap o el examen clínico sea no concluyente respecto de la existencia de una lesión cervical precancerosa”.
Qué es el VPH
El VPH es una de las infecciones de transmisión sexual más comunes. Se estima que el 80% de las mujeres desarrolla la infección en algún momento de su vida. Sin embargo, aproximadamente el 90% de todas las infecciones se eliminan por el sistema inmunológico; no obstante, un grupo de mujeres puede evolucionar con infección prolongada e incluso desarrollar un cáncer debido a cambios secundarios en las células en el cuello uterino. El Dr. Frank explica que “es frecuente en la mujer menor de 30 años, pero en ellas el sistema inmunitario local y general con frecuencia es capaz de eliminar el virus del organismo”. Por eso, el especialista sostiene que “el poder detectar a aquellas mujeres portadoras del virus de alto riesgo y que persistan después de esa edad, es relevante para prevenir las lesiones del cérvix”. Por último, el médico asegura que la experiencia con este moderno test “ha sido excelente y ha favorecido a muchas mujeres, por eso considero que es un gran complemento para prevenir el cáncer”.