En junio de 2017 entró en vigencia una nueva Ordenanza Municipal en Viña del Mar en torno al comercio ambulante, la cual incorporó como gran novedad el multar a las personas que compran artículos a vendedores ilegales en las calles de la Ciudad Jardín. Según explicó Macarena Urenda, “esta Ordenanza se realizó pensando en erradicar definitivamente el comercio ilegal en la comuna, ya que vemos cómo se viola la ley y cómo se trasgreden las normas, lo que naturalmente afecta negativamente a los habitantes de la comuna”.
Transcurrido un semestre de su puesta en marcha, la concejala admitió que “nos ha costado poder fiscalizar y que el comercio ambulante disminuya de manera significativa. El control de esta actividad informal no ha sido fácil y creo que eso ha sido evidente, por ejemplo en el sector de la Avenida Valparaíso”.
Sin embargo, Urenda enfatizó en que “no hemos dado la tarea por perdida y estamos generando un trabajo de reorganización de los sistemas de fiscalización de la Municipalidad y además nos organizaremos con otras fuerzas involucradas en el proceso, porque recordemos que los llamados a fiscalizar no sólo son los inspectores municipales, sino que también los carabineros y la fuerza pública en general”.
La edil de Viña del Mar aclaró que “en época de verano es aún más difícil poder controlar el comercio ambulante, pero pese a ello, se ha logrado solucionar en parte el problema en varios sectores del borde costero. El factor clave es la fiscalización, y ya estamos trabajando intensamente para ello con la policía sobre todo en los sectores más críticos donde se produce el comercio ilegal callejero”.