• Dentro del compromiso de la sanitaria con el medioambiente y una gestión sostenible, se realiza un programa anual de limpieza en la ribera de este embalse. Se reiteró el llamado a la comunidad a colaborar en el cuidado del espacio.
El subgerente zonal de Esval, Alejandro Pérez, indicó que durante 2024 se retiraron alrededor de 18 toneladas de basura en los alrededores del tranque La Luz de Placilla de Peñuelas, como parte del programa anual de limpieza que realiza la sanitaria.
“Dentro de nuestro compromiso con una gestión sostenible y la protección del ecosistema de este embalse, efectuamos más de 20 operativos al año para evitar la acumulación de desechos y escombros en la ribera del tranque. Lamentablemente, en ocasiones vemos que quienes visitan este hermoso espacio no se preocupan de recoger su basura, por lo que encontramos desde bolsas, restos de comida y envoltorios, hasta botellas y otros elementos”, señaló el ejecutivo.
Pérez detalló que en estos operativos, que se realizan con una periodicidad quincenal, se extraen unos 10 metros cúbicos de basura al mes, cifra que dependiendo de la densidad de los desechos puede alcanzar hasta 1.500 kilos. “Este esfuerzo requiere también del apoyo de la comunidad y visitantes, a quienes llamamos a hacerse corresponsables en el cuidado de este embalse y su entorno”, comentó.
Esta iniciativa de Esval se suma al programa de conservación ambiental del tranque La Luz iniciado por la sanitaria en 2022, a través de la instalación de un sistema de biorrollos, que ha permitido apoyar la protección de las aves de la zona y del “Sapito de cuatro ojos”, especie en categoría de conservación que se ha visto amenazada en nuestro país.
Situación actual del embalse El tranque La Luz es actualmente utilizado por la sanitaria para la producción de agua potable, y gracias a las lluvias del año pasado, se encuentra a su máxima capacidad -sobre 5,5 millones de metros cúbicos- respaldando el abastecimiento de más de 15.000 hogares de Placilla y Curauma para toda la temporada.
Finalmente, y ante la mayor afluencia de público durante el periodo estival, Pérez reiteró la importancia de respetar las indicaciones del lugar y no realizar actividades que puedan poner en riesgo a personas o al propio ecosistema del tranque.