En Profundidad de Campos, el legislador de la Comisión de Hacienda propone medidas para dar “un respiro real” a emprendedores y sugiere la idea de un “presupuesto de bienestar” para 2021. Mira la entrevista completa aquí.
Con más de 2 millones de chilenos cesantes y casi un 25% de la fuerza laboral inactiva para 2021, la recuperación económica será el principal eje del próximo Presupuesto de la nación.
En Profundidad de Campos, el senador Ricardo Lagos Weber, integrante de la Comisión de Hacienda, destaca que “hay un compromiso de que el presupuesto el año que viene no se va a reducir” y agrega que estará vigente el Fondo extrapresupuestario de US$12 mil millones acordado en junio.
Pero el legislador empuja otros planteamientos de cara al erario nacional, como por ejemplo un “presupuesto de bienestar”. “Estamos empujando la idea de trabajar en un presupuesto, no que tenga más ‘lucas’ necesariamente, sino una metodología que nos permita medir de qué sirve para cambiar la calidad de vida de los chilenos, un presupuesto de bienestar”.
El senador enfatizó que “El Ejecutivo se tiene que obligar a demostrar que el presupuesto influyó en la calidad de vida de las personas. Esperamos que el Ministro se abra a eso”.
En relación a la recuperación de la economía y las pymes, Lagos Weber plantea que “tal vez hay que pensar en apoyos directos para la reactivación, incluso me atrevo a decir que, para empresas de cierto tamaño, haya una exención tributaria por un período acotado. Un respiro real, acotado en el tiempo, pero real”.
¿SE FIRMA ESCAZÚ?
El congresista también tuvo palabras por la negativa del Gobierno a ratificar el Acuerdo de Escazú, el mismo que lideró en la primera administración de Sebastián Piñera y cuyo plazo para ello vence este 26 de septiembre.
“El tema medioambiental es un tema de carácter global, requiere entendimientos globales. Chile puede hacer lo mejor del mundo, pero si los vecinos hacen poco o nada, nos vamos a ir ‘a las pailas’ igual”, señaló.
“Chile convocó a esto y, a última hora, el Gobierno se echó para atrás, le quitó piso al medioambiente y a Cancillería (…). En 2 años, no han podido poner por escrito por qué rechazan el Acuerdo de Escazú”, sentenció.