Con un show lleno de clásicos y nuevos temas, Jamiroquai ha logrado cautivar a los «vaqueros espaciales» y también a quienes han llegado a la Quinta Vergara a esperar a Europe.
Con un JayKay inspirado con su casco de plumas led, versión modernizada de su habitual gorro de plumas de gran jefe indio, y arrancó con Shake it on, de su nuevo disco Automaton.
El público le dio una bienvenida entusiasta abarrotando el escenario principal, mientras los otros cinco espacios de conciertos perdían espectadores a ojos vista.
Jay Kay se le veía incómodo y acalorado con su casco de ledes, que según comenta la producción, le obliga a llevar guantes y chándal de manga larga para esconder los cables con los que acciona los movimientos de las plumas, pero contento con la acogida del público y agusto con la banda.
Sin embargo, a pesar de todo el despliegue técnico, Jamiroquai en poco mas de una hora tiene a la Quinta Vergara encendida al ritmo del funk-pop y su particular despliegue.